“Portación de arma de fuego de uso exclusivo del Ejército, Armada y Fuerza Aérea”, se lee en uno de los expedientes que han sido abiertos este año para juzgar a adolescentes en Aguascalientes. Es así como un menor de edad enfrentó el inicio de su proceso penal por este delito en mayo del 2021.
Los adolescentes en esta tierra están siendo juzgados por ilícitos con amplia vinculación con cuestiones del narcotráfico y el crimen organizado, siendo los delitos contra la salud los que ocupan el primer lugar de incidencia entre menores de edad, de acuerdo a investigación de Latido Online.
A los delitos contra la salud le sigue la violación y son estos dos ilícitos los que con mayor frecuencia están llevando a adolescentes de Aguascalientes a los tribunales penales a enfrentar carpetas de investigación que concluirán en todos los casos, con menos de cinco años de prisión, pues esta es la condena máxima a la que pueden ser sometidos por tratarse de menores de edad.
Actualmente, el Poder Judicial del Estado de Aguascalientes, reporta que de enero al corte de octubre 2021 un total de 57 carpetas digitales fueron iniciadas en el Juzgado de Control, Juicio Oral Penal y Ejecución Especializado en Justicia Para Adolescentes, por delitos relacionados con el consumo, distribución o posesión de sustancias ilícitas.
A los delitos contra la salud le sigue la violación y por esta causa se iniciaron en el mismo periodo un total de 31 carpetas de investigación contra adolescentes de Aguascalientes.
Respecto a lo anterior se debe de considerar que las estadísticas oficiales sobre los procesos penales iniciados representan una cifra mínima a comparación de lo que se vive en la realidad de este y otros estados de la República pues existen casos que nunca son denunciados y quedan condenados a la impunidad.
Para darnos una idea, la cifra negra delictiva en México se ubica en un 93.3%, es decir, en más de nueve de cada diez delitos nunca hubo denuncia o bien, la autoridad competente nunca inició una carpeta de investigación y a esto precisamente se le denomina cifra negra. Estos datos corresponden a estadísticas dadas a conocer por el propio INEGI.
El Poder Judicial de Aguascalientes reporta que las lesiones dolosas ocupan el tercer lugar de incidencia de ilícitos por los que se están judicializando los casos en los que están involucrados adolescentes, mientras que uno más enfrenta el inicio de un proceso penal por portación de arma de fuego de uso exclusivo del Ejército, Armada y Fuerza Aérea.
Sin cumplir aún la mayoría de edad, los nombres de cinco adolescentes de esta tierra del centro del país se incluyeron en la apertura de carpetas digitales en las cuales tendrán que enfrentar acusaciones por secuestro y privación ilegal de la libertad.
Hasta el momento, del total de adolescentes procesados, en el periodo de enero a octubre del 2021 han recibido sentencia únicamente siete, mientras que en el proceso abreviado (en el que aceptando la culpabilidad se disminuye la pena) se tiene un registro de 51 casos.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos, la gran mayoría de los adolescentes que viven en una realidad criminal sufren situaciones de violencia, abuso y negligencia en sus hogares, comunidades y escuela, por parte de adultos, de sus pares e incluso de la policía.
“Muy a menudo los niños y los adolescentes sufren presiones, amenazas o engaños para que colaboren con organizaciones criminales o grupos violentos. Esto los pone en una situación de gran vulnerabilidad, en la cual se facilita su captación y utilización por grupos criminales”, destaca la CIDH en su informe de Violencia, Niñez y Crimen Organizado en América.
Los menores de edad que han sido reclutados por la delincuencia organizada y son detenidos, generalmente enfrentan procesos por delitos contra la salud. En zonas de “alto riesgo”, los niños comienzan a identificarse con delincuentes desde muy temprana edad además de ser entrenados por ejemplo, para el manejo de armas, existiendo casos documentados en los que niños de 6 a 8 años de edad ya tienen contacto directo con este tipo de artefactos.
La realidad en México es tal que la Asociación Civil Reinserta ha alertado sobre la captación de más de 30 mil niños y adolescentes reclutados por células criminales y en algunos casos, reciben hasta 35 mil pesos mensuales como pago, sin considerar que en realidad pagan en el mejor de los casos con la pérdida de su libertad y en el peor y no poco frecuente caso con la vida misma.
