“Súper” abusivos al sur de la ciudad

Aprovechando que son los principales proveedores de fraccionamientos cerrados al sur de la ciudad, tiendas de abarrotes instaladas al en aquella zona, inflan sus precios sin que ninguna autoridad intervenga.

Por un refresco, leche, dos donas y un agua de horchata, Eréndira pagó 178 pesos, no le entregaron ticket de compra y los precios nunca fueron exhibidos; este es uno de tantos ejemplos que diariamente se registra en el “Súper Mediterráneo”, lugar que es el único que tiene Eréndira a su alcance cerca de su vivienda.

Y es que, además, el monopolio es otro de los aspectos que han afectado la economía de habitantes de fraccionamientos cerrados o semi cerrados, pues por “reglamentos” no oficiales ni legales, no se permite la apertura de negocios al interior de las zonas habitacionales.

Afectados se pronunciaron por la intervención de autoridades como Profeco.

Los precios no son exhibidos

Según el artículo 7 bis de la Ley Federal de Protección al Consumidor el proveedor está obligado a exhibir de forma notoria y visible el monto total a pagar por los bienes, productos o servicios que ofrezca al consumidor, una omisión frecuente en tiendas de abarrotes o “super” que operan en los fraccionamientos de -relativamente- reciente creación.

Productos de alta demanda como refrescos, pan dulce de marca y lácteos, son vendidos al público con sobreprecio, mientras que no existe control alguno de inspectores o verificadores encargados de evitar el abuso a los consumidores.

Profeco es la instancia obligada a realizar la verificación comercial en este tipo de negocios y entre otras cosas, debe revisar que exhiban y respeten precios evitando el alza injustificada de los precios.

Deja un comentario