Con miedo se vive en el Pueblo Mágico de San José de Gracia

«Camionetas nos siguen por la noche, aquí la venta de droga es una actividad que ha crecido mucho, el alcalde no hace nada, siguen desapariciones, narcofosas, las cosas se están poniendo feas», revela uno de los habitantes de San José de Gracia que asegura que el Pueblo Mágico se ha convertido en un área insegura dentro de Aguascalientes.

Entre varios ejemplos, destacan que en pleno mercado principal, a unos metros de la Presidencia , se vende alcohol a menores de edad y fuera del horario permitido, y esto, bajo el aval del propio alcalde Armando Rodríguez Domínguez, quien en sesión de cabildo del 2 de mayo del año 2022, votó en contra de la prohibición de venta de bebidas embriagantes en dicho mercado.

Lo anterior, pese a que la ciudadanía refiere que en esos lugares se llevan a cabo actividades ilícitas y fuera de todo control del Ayuntamiento. Por ello, se llevó al cabildo la propuesta de eliminar los puntos de venta de bebidas embriagantes al seno del mercado, lo cual, rechazó el alcalde, Armando Rodríguez Domínguez y los siguientes regidores:

  • Adrián Sánchez Hernández
  • Rosa Elena Ramírez Santos
  • David López Ramírez
  • Socorro Adriana Alvarado Armendariz

Tres fueron las regidoras que votaron a favor de la propuesta de eliminar los puntos de venta de bebidas embriagantes en el mercado municipal, siendo el único en su tipo que tiene este giro de negocios:

  • Yaritzia Citlaly Ibarra González
  • Erika Leticia Reyes Hernández
  • Sonia Cristina López Ávila.

Cuestionados al respecto, habitantes de San José de Gracia que pidieron anonimato por temor a represalias, señalaron que la venta de bebidas embriagantes es uno de los negocios que bajo presta nombres maneja la familia del alcalde, por lo que no era de extrañarse la votación en contra de la regulación de actividades en el principal mercado del ayuntamiento.

De igual forma, refirieron que por las noches han sido testigos «con preocupación» de la presencia de camionetas y motocicletas que en la madrugada hacen «extraños recorridos, sin ubicar la procedencia de dichas unidades. «Este es un pueblo en el que todos nos conocemos y sabemos que esto no era común».

Con precauciones dicen vivir, lo cual, entre los Josefinos no era habitual, pues siempre se caracterizó por ser un pueblo pacífico, sin embargo, la venta de sustancias ilícitas y consumo de bebidas embriagantes y drogas entre la población ha cambiado su realidad, cuentan quienes han habitado el lugar durante toda una vida.

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